YACIMIENTOS DE HIDROGENO bajo tierra
En el este de Francia y en otros lugares del mundo, los depósitos de hidrógeno natural prometen abundante energía. Pero quedan preguntas.
Por Liz Alderman en The New York Times del 4 de diciembre de 2023
En el suelo rocoso de Lorena, una antigua región minera de carbón cerca de la frontera franco-alemana, un día reciente los científicos guiaron una pequeña sonda por un pozo de media milla dentro de la corteza terrestre. Hacer espuma en el nivel freático de abajo fue un hallazgo emocionante: burbujas del tamaño de champán que indicaban un alijo potencialmente gigantesco del llamado hidrógeno blanco, uno de los combustibles de combustión más limpia de la naturaleza. “El hidrógeno es mágico: cuando lo quemas liberas agua, por lo que no hay emisiones de carbono que calienten el planeta”, dijo uno de los científicos, Jacques Pironon, investigador principal y profesor de la Universidad de Lorena. “Creemos que hemos descubierto uno de los depósitos de hidrógeno natural más grandes del mundo”. El descubrimiento realizado por Pironon y otro científico, Philippe de Donato, ambos miembros del respetado Centro Nacional de Investigación Científica de Francia, causó sensación en Francia, donde el gobierno ha prometido convertirse en líder europeo en hidrógeno limpio.
Todavía quedan muchas preguntas sobre el hallazgo, incluido su tamaño exacto y la mejor manera de extraer el gas. Pero se ha sumado a una serie de pistas en otras partes del mundo de que un santo grial de energía limpia puede estar bajo tierra para ser tomado.
Gobiernos y empresas de todo el mundo vienen apostando por el hidrógeno como piedra angular en la lucha contra el cambio climático.
Ha surgido una industria multimillonaria, respaldada por miles de millones más en subsidios e inversiones privadas, para apoyar la fabricación de hidrógeno, que en teoría podría sustituir a los combustibles fósiles para impulsar fábricas, camiones, barcos y aviones, eliminando potencialmente alrededor de la mitad de toda la producción de emisiones que calientan el planeta.
Pero producir hidrógeno comercial implica dividir el agua en hidrógeno y oxígeno, una tarea que requiere energía.
Si se utilizan combustibles fósiles, el proceso genera emisiones de gases de efecto invernadero y el resultado se denomina hidrógeno gris.
Aprovechar la electricidad renovable procedente de turbinas eólicas y paneles solares para producir lo que se llama hidrógeno verde es más limpio pero más caro.
El hidrógeno natural, también llamado hidrógeno blanco debido a su pureza, podría cambiar las reglas del juego, dicen los científicos, porque es una fuente potencial de energía limpia generada continuamente por la Tierra.
Los depósitos de hidrógeno se forman cuando el agua calentada se encuentra con rocas ricas en hierro.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, sólo una pequeña fracción de estos depósitos podría proporcionar suficiente energía limpia para cientos de años.“Si verifican este descubrimiento, entonces será muy significativo y tendría un gran impacto en la sociedad”, dijo sobre el hallazgo francés Geoffrey Ellis, geoquímico del Servicio Geológico de Estados Unidos y experto mundial en hidrógeno. “Hay muchos otros lugares en todo el mundo donde también se podrían realizar hallazgos similares, y la gente los está mirando porque realmente podría tener un impacto”.
En Lorena, los científicos dijeron que sus pruebas sugerían que entre 46 y 260 millones de toneladas métricas de hidrógeno natural podrían estar acechando debajo de las minas de carbón, que fueron abandonadas en la década de 1970 cuando Francia pasó a la energía nuclear. En comparación, cada año se producen comercialmente alrededor de 70 millones de toneladas métricas de hidrógeno en todo el mundo.
Recientemente se han detectado serpientes en partes de Estados Unidos, Australia, África, Rusia y también en otras partes de Europa.
No es inusual encontrar hidrógeno al perforar en busca de gas o petróleo, pero en el pasado las empresas ignoraron esos descubrimientos debido a la baja demanda.
Los investigadores no le dieron mucho crédito al hidrógeno blanco hasta un descubrimiento casual en Bourakébougou, un pequeño pueblo de Mali, en 1987, cuando un trabajador prendió fuego accidentalmente a un pozo de agua encendiendo un cigarrillo sobre él. Se descubrió que el pozo contenía hidrógeno natural y ahora se utiliza para alimentar tiendas y hogares después de que un empresario local contratara a una compañía petrolera para extraer el gas.
Ver nota completa en https://www.nytimes.com/2023/12/04/business/energy-environment/clean-energy-hydrogen.html?smid=nytcore-ios-share&referringSource=articleShare
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